Hoy tengo un deseo.
Deseo contarles una historia.
Es más
vieja que la manzana dorada y más antigua que los dedos de dios. Más
vieja que el atardecer y más fuerte que la tormenta. Cuando la conozcan,
les pasará lo que a mí: se olvidarán de quién la ha contado y la
recordarán sólo al ver, tal vez, una estrella, o al sentir el beso suave
de otros labios.
O tal vez se la olviden para siempre.
Ésta es la historia.
Hubo
una era en que el hombre y la mujer eran uno, en el mundo cálido y
líquido de la unión perfecta. El mundo era pequeño y dormía en un
amanecer eterno, mecido por líquenes y alumbrado por rayos de luna.
Y entonces sucedió la desgracia. Vino como la tormenta, la catástrofe.
Cayó el rayo y nos separó.
El
rayo alumbró la muerte y el conflicto, el grito y la discordia entre
los dos seres fragmentados. El mundo creció, maduró, envejeció. Hubo
hambre en el antiguo vergel, en el manantial puro hubo sed.
Desde
entonces nos estamos buscando y nos amamos y nos peleamos porque
deseamos, sin saberlo, volver a sentirnos completos en el mundo del
origen.
Esta Noche espero que se vean las estrellas.
Estos son mis Sueños y Deseos, los poemas que se escribieron en noches estrelladas en este mundo viejo.
I
En un sueño de mi dulce dueño
Soñaba yo que su dueña era
Dulces son cadenas si me atan a su pecho
Y dulces mis piernas, esclavas de su espalda
Dulce es el infierno a sus brazos atada
Es un sueño el que mi dulce dueño
Quiso al fin que su dueña fuera
II
La Flecha ardiente derramada
El Beso más dulce
Que nunca diera Espada
III
Tengo sed
Sed de amante lluvia que derrita la máscara
Que me despoje de escudo y me desarme de lanza
Y quede desnuda la rosa encarnada
Que se esconde en noche junto a alta ventana
Ser envuelta en ámbar
Mi
deseo es siempre el mismo, aunque pueda contar a veces cosas tristes
(el caer del rayo), la felicidad está en no dejar pasar las nubes sin
verlas ni aún llorando. Así, mis deseos, copas amigas, ámbar en mis
labios, noches de amor y la mano de mi compañero junto a mí cada noche.
Perfumes y secretos. Y deseos.
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