miércoles, 28 de octubre de 2015

La Rosa

Pálida osadía de la rosa abierta
Herida sin muerte
Por tan dulce Flecha
Que vierte tan buena
Tan dulce violencia

viernes, 16 de octubre de 2015

Para una historia de mi Jardín de las delicias

Es mi primer novela, no la única. Su desarrollo tuvo varios años de idas y vueltas, su escritura, cuatro meses, cuatro de los meses más felices de mi vida....Fue por añorarlos que escribí mi segunda novela, Rebeca: cada tarde sentada frente a una máquina pequeña de teclado negro que significaba colores multiplicados, besos hasta el infinito y muertes terribles y muertes serenas....Vidas únicas que podían vestirse de todas las vestiduras y pronunciar las frases que quisieran, de la mano de ésta nueva versión del Mago de Oz con Zapatos Rojos que era yo.
No quiero hablar yo sobre mi Ulises, al que llevé a viajar por un jardín un tanto especial, tomado de cuadros, de melodías....de hadas blancas y oscuras...Dejaré que hablen mis críticos:

" El viaje de un moderno y al mismo tiempo antiguo Ulises a través de situaciones  y personajes sacados del mundo literario y sumergidos en un contexto actual, se convierte en el viaje de todos los hombres que sienten el peso de su propio destino, llegados el momento de reflexionar sobre la vida y la muerte"
Molto grazie, mi anónima y querida voz italiana que plasmó éstas palabras sobre mi libro para una agente literaria turinesa. Es una novela muy italiana y de hecho en su presentación habló el actor bolognés Matteo Belli, junto con mi gran amigo el humorista Rudy....

Vale la honesta y agradable crítica de Carlos Ferro para Axxón. Notó con gran inteligencia mi mayor dilema como novelista: el discurso del personaje de Circe. ..."nos cuesta" acota, y sí, el personaje requería eso, no así todos los lectores....

Me divirtió meter a mi madre en el mismo vagón de subte o metro que Ulises y adoré cuando mi madrina Lidia, la "Negra", me dijo que no dejó el libro hasta que lo terminó.

Por supuesto, como toda joven (tenía 35 años) escritora en el sorteo del Destino de la Joven Novelista Mujer, me tocó la crítica de un español, muy español, real académico, el cuál pronunció de cara al Porvenir: "Deja de escribir mariconadas con referencias literarias".
Dicho por Arturo Pérez Reverte. Pero no es más que un fenómeno recurrente en la carrera de la novelista mujer, el Juicio Final del Gran Escritor, que sin saberlo, está marcando que estás lista para mucho más que un Comienzo..



domingo, 11 de octubre de 2015

Un estudio científico del llamado Langa

El langa no es una especie animal pero casi. La etimología de la palabra lunfarda se obtiene invirtiendo el orden de las sílabas, de lo que resulta la palabra castellana Galán.
Alguna vez escribí un bestiario, y tuve que investigar los orígenes de bestias como el unicornio, el hipogrifo o la Medusa. Esto me confiere cierta autoridad para abocarme al estudio fisonómico-arquetípico -biológico de este homo reconocido por todas las mujeres, al que llamamos un tanto peyorativamente, langa.
En su origen el término langa se acuñó porque a esta clase de galán argentino el exito de su seducción no le interesa, por eso nunca lo obtiene. El langa es un homo que le da más importancia a su corte de pelo, primordialmente. La mujer que atrapada en las redes de la poco conveniente cortesía se ve obligada a ser oyente de la pantomina del langa y su ejercicio teatral de la seducción, es para el langa, como el vidrio del subte o el espejo ocasional donde se pasa el peine extraído del bolsillo del vaquero, hacia un lado y hacia el otro, con artística atención.
El langa de hoy ostenta un peinado leonino, inflado y un poco largo, idéntico al de los actores de telenovelas de los años setenta. El pelo es de vital importancia en un langa: si  no percibimos una dedicación inusual al pelo, tal vez ese homo no sea un langa y usted debe plantearse que está intentando seducirla de verdad.
Si la edad del langa está entre los 45 y 55 años, el pelo es ese estilo García Satur (conocido actor de famosa telenovela setentista): esto está emparentado con el origen mismo del langa.De la masa primigenia de un homo infantil que contempló a su madre babear por esa competencia masculina que de tres a cuatro de la tarde se agigantaba en el televisor en blanco y negro opacando al mismímo progenitor de la criatura a los ojos de MAMÄ, se llegó al patológico langa adulto. Si el psiconálisis estudió la histeria femenina, evidentemente se olvidó de nuestro objeto científico, el langa.Lo cual nos permite un estudio mucho más moderno del mismo.Retomaremos este tema.
MODELO DE SITUACIÖN: EL LANGA Y YO.
Nombre : Rubén, Raúl o Ricardo. También Orlando, Gastón, o Raúl Gastón , Rubén Orlando y todas las combinaciones aritméticas posibles con estos nombres.El langa es prácticamnete una proyección de sus progenitores hecha realidad. En la primer ecografía dónde se puede ver que es varoncito, el obstetra no dice: es un Varón. Dice: Felictaciones, señora: va a tener un langa.
Durante el embarazo, la madre setentista escuchaba a Nino Bravo, ahora escucha a Arjona. Vamos a ampliar estas definiciones, de suma importancia en el estudio de esta especie.Nuestras madres se pasan la vida advirtiéndonos sobre el Peligro Langa. Los consideran peligrosos, verdaderos Condes Dráculas para nuestra femineidad inocente. Esto es parte del desconocimiento social de la verdadera naturaleza del Langa.El Langa no quiere relaciones con nosotras: para eso está su legítima esposa. Para el Langa, somos el espejo donde se mira el jopo mientras practica las distintas variantes del Verso Novelero con voz de barítono.
En cierta ocasión, mientras escuchaba a un Langa en el hall de un Teatro , una amiga desesperada levantó un cartel escrito con un marcador que decía.NO LE CREAS NADA.! Gracias, querida amiga, el Langa no encierra peligro alguno para mi honradez. Este cumplía las condiciones estudiadas: Pelo largo y leonino, Campera de cuero, cartera de cuerina bajo el brazo y se llamaba Rubén. Su soliliquio pseudoseductor en voz grave de locutor era interrumpido cada diez minutos: su hijito de diez años le reclamaba una hamburguesa. El langa abandonaba en dos segundos su postura novelera para decir fastidiado y con voz agria. Andá allá con tu madre.
Y ahí estaba la madre del niño, esposa del Langa, a tres metros, rezongando: Andá con tu padre.
Finalmente, el Langa se va resoplando con el niño y le compra una hamburguesa. Yo tomo nota de todo y tomo un par de fotos del individuo, para ilustrar mi estudio sobre el particular, que pronto verán, si están suscritos, en la prestigiosa revista Nature